Ricardo (Lucas) Cuello, hace años, permitió que a un ranchito de su
propiedad, se trasladara, en precarias condiciones, la escuelita veredal de
“Río Negro”, desde el predio donde se ubicaba cuando los nuevos propietarios
objetaron su presencia.
En esas
condiciones, funcionó el aula única con su maestro y 18 niñas y niños, hasta que
don Bernardo González Aristizabal, empresario de Bogotá, nacido en Antioquia,
hombre de vasta cultura, humanista capaz de dejar un legado para la posteridad,
quien al enterarse de la obra de Lucas, decidió apoyarlo donando el magnífico
edificio donde hoy funciona la escuela, dotando completamente, incluso con
biblioteca, un computador e impresora.
En época de
vacaciones, grupos de maestros como del Colegio Nueva Granada de Bogotà, han
venido a hacer trabajos de voluntariado a esta obra.
Hoy niñas y niños de la zona, asisten a
una moderna escuela, con la maestra paga por el mecenas y donde además, reciben
toda la dotación académica, kit de aseo y refrigerios.
Ojalá que
cada excursionista visitante al sitio “donde Lucas”, se contagie de este
espíritu solidario y en la medida de sus posibilidades, lo duplique.
Don Bernardo
González Arìstizábal, (foto) además de empresario e inversionista exitoso, es
un hombre de vasta cultural y escritor: dentro de su obra literaria, podemos
mencionar:
- Viaje de bodas alrededor del mundo.
- Anécdotas y religiones
- Nueve de abril en las calles de Bogotá.
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